domingo, 20 de agosto de 2017

"Demonios del Pacífico Sur" José Pancorvo

 
 
Conocí a Dn. José Pancorvo por mis amigos de Tradición Familia y Propiedad y lo veía seguido en las Misas de San Marcelo, cuando la Asociación San Pio V organizaba la Misa de Siempre en esa Iglesia, siempre saludaba afablemente aún siendo un erudito y un hombre fascinante.
 
Sabía que había escrito un libro y siempre quise dárselo para que me lo firme después de leerlo con la absurda vanidad de comentar algo del libro y sonar interesante. El tema es que nunca conseguí el libro a tiempo sino mucho después de su partida.
 
La única firma que tengo de él es en un diploma de un curso de tomismo que Tradición y Acción por un Perú Mayor realizó, recuerdo que él mismo me dio el diploma de participación. Pues bien, terminé de leer "Demonios del Pacífico Sur"  ¡Qué historia tan actual y eterna a la vez!. Desde ya es mi novela favorita. Que detalle de tantas verdades. Habla sobre la fe, sobre qué es el Perú, sobre la guerra épica contra el infierno, habla de la Hispanidad y ¡de banderas!; es la novela más vexilológica que he leído y con cuanta razón dice las cosas. Destruye a los falsos ídolos de la diabólica balcanización británica de las Américas. ¡Al fin alguien los pone en su sitio!. Habla del rosario en manos de los guerreros, en Lepanto, La Vendée, la Guerra Cristera. Ahí justamente en aquellos lugares de donde nace nuestra identidad. Indispensable lectura para emocionarse con conocer más de nuestra historia e identidad. La devoción a Santa Rosa y la descripción de las banderas del Regimiento Infante Carlos me erizaron la piel, nunca ni en el colegio había sentido tanto orgullo de ser peruano y limeño.
 
**SPOILER ALERT**
 
 La secuencia del exorcismo en quechua me arrancó lágrimas de emoción. Cómo si el demonio no soportara la catolicidad del Perú. Ciertamente somos la cristiandad indiana y es en la fe donde se basa nuestra vocación imperial. Ser peruano, ser católico, son reflexiones importantísimas frente a la afrenta de celebración del bicentenario, son reflexiones impostergables frente a la censura y mentiras que en los colegios y desde la propaganda estatal de la República que ocupa el Perú.
Ser santos, recuperar la hispanidad y el Orden Social Cristiano es consecuencia y razón de ser de nuestra nación. Estos reinos existen como premio a España por la reconquista, Toda América, desde Alaska a Tierra del Fuego es la Cristiandad a Reconquistar, es una tierra a liberar con espíritu de Cruzada. Y el Perú está llamado a ser protagonista. Cada reino, España, como Madre Patria, México, como custodios de Nuestra Señora, el Perú Imperial, Chile, Ecuador del Sagrado Corazón, Filipinas, Guinea Ecuatorial, todos los reinos y naciones de la Hispanidad tenemos una vocación altísima que no puede realizarse si no arrancamos la victoria desde el corazón de cada uno: La piedad tradicional, de rosario y sacramentos, la restauración litúrgica, las obras de misericordia, la lectura del Evangelio, la defensa del Papado , de la Monarquía Católica, de la Vida y la Familia. Ésa , y no otra, es nuestra esencia y nuestra lucha.
 
Hay mucho que hacer y poquísimo tiempo, Dios, la Santísima Virgen María y Santa Rosa nos obtengan la restauración del Perú e Hispanoamérica como herramienta para la restauración del Orden Social Cristiano para gloria de Dios y bien de las almas.
Quizás fue providencial que no haya tenido el autógrafo de Dn. José, su libro se ha convertido en mi favorito y releeré sus párrafos y citas referenciadas. No puedo juzgar los recovecos del estilo o calidad del estilo, eso me supera y no me importa tanto en realidad. Es el mensaje, es el derrotero que señala el que me ha conmovido.
 
Ruego pueda agradecerle a Dn. José cuando lo vea en el Cielo.
Que así sea.

"Mitad Monjes, MItad Soldados" Pedro Salinas / Paola Ugaz


El libro es impostergable, cierto que es crudo, gráfico y para algunos quizás chocante, pero creo que es necesario, no hay que tener miedo a la historia de la Iglesia y las partes más oscuras son muchas veces las más edificantes.
El formato es una recopilación de testimonios, sazonados con las opiniones y conclusiones de los autores y me parece que cumple bien con el cometido. Fue necesario publicarlo y considero que también leerlo.

Leí el libro porque me parece interesante conocer que cosas pasaron en una institucion a la que estuve ligado por mucho tiempo, graciasa Dios no me paso nada malo, mi experiencia fue 100%  positiva y mucho de lo que soy se lo debo al mvc y la Familia Sodálite,  también muchos de mis amigos más cercanos, son de ésa época, pero veamos, hay que reconocer que sacar a la luz estos temas es necesario, y a la larga, más allá de las intenciones quienes lo hacen, un servicio a la verdad y a la necesaria purficación de la Iglesia. Hay que tener en cuenta también, que estos casos  por su misma naturaleza la investigación de la Iglesia es reservada y ajena a prisas mediaticas, lo que no quita que dada la cantidad de casos, la situación de los culpables y vícimas hace razonable pensar que hay encubrimientos, desidias y deficencias- todo debe decirse- en el manejo de las diferentes crisis.
 
Evitando esta perspectiva, convenientemente vemo como un  tema evidente en el libro es que Salinas quiere echar la culpa a la Iglesia y sobre todo al cardenal Juan Luis, su odio personal parece llevarlo a alusiones gratuitas a la Obra que ya rayan en lo poco serio.
Así mismo deja de ocuparse de los casos de abuso para condenar como negativas muchos elementos del sodalicio como el combate a la infiltración marxista en la iglesia, la urgencia del apostolado o la visión militante de los cristianos frente al mundo.
Esto hace sospechar que este instrumentalizando el drama de las victimas de abuso para intereses particulares , pero no lo sabemos, podrían también coexistir ambas cosas.  Lo importante aquí es que se ha hecho publico un tema de abuso sistemático para advertir a padres de familia , y a miembros de la iglesia, eso es muy importante, e independientemente de las intenciones, Salinas y Ugaz han prestado un servicio a la Iglesia y a la sociedad.

Frente a esto el derrotero a seguir, es algo que compete a la misma organización y la Santa sede, la opinión publica, la presión mediática es totalmente irrelevante y esto debe quedar claro.
Cuando en México se destapó lo de la Legión, yo pensaba que debía quedar  la institución, al ser una espiritualidad aprobada, pero quizás no sea del todo negativo prescindir de estar realidades, los movimientos eclesiales se presentaron como la primavera de la Iglesia , pero si esa es la primavera ¡cómo serán los inviernos! ¿no será el momento de prescindir de experimentos raros y volver a la piedad tradicional de la iglesia?.

Tengo amigos sodálites que admiro muchísimo pero aplicando lo de "ante la duda la máxima exigencia" ¿no será la disolución una expiación luminosa para el mundo? ¡cuántos sodálites, fraternas, siervas y agrupados  con toda la formación y espiritualidad insertados en el mundo, en parroquias y familias!, ¿no será el derrotero esperado? no pensar en formar y hacer apostolado a familias o buscar ser apóstoles de apóstoles sino ser esos apóstoles, esos profesionales formados, esos padres de familia de rosario los sábados, de plan de vida. ¿no será hora que los centros pastorales sean las casas de las familias?. Yo doy fe que después de la familia sodálites todo lo bueno que se ha recibido queda incólume, porque lo dio Dios. Si se pierde o se abandona no es por dejar la Familia es por el propio pecado y eso también pasa dentro. Doy fe y me consta que la "amistad en el Señor" que se predica como norte para las Agrupaciones Marianas subsiste después de disuelta una agrupación. Doy fe y me consta que una casa de familia puede ser un centro apostólico, Doy fe y me consta que la advocación mariana de la ciudad puede prescindir un rosario de los sábados. He visto cómo lo bueno y divino de la experiencia es anterior a la espiritualidad sodálites y subsiste sin ella.
 
No dudo del "Digitus Dei est Hic" que leíamos de boca de un monseñor (Vargas de Somocurcio si mal no recuerdo) es verdad, pero entendido como que a pesar de una realidad mala o desordenada, o un instrumento para el mal puede incluso actuar Dios. Hay gente que se convierte en la cárcel, tras un cáncer o incluso en fenómenos rarísimos como Medjugore o bienintencionados pero raros como las JMJ. Dios actúa siempre. No creo que se pierda con la disolución del sodalicio sino que se ganaría un montón, pero no me corresponde a mí decidirlo y me puedo equivocar, quizás es sólo el abandono, el patear el tablero, el reproche por haber estado ahí. Quizás. Pero sinceramente creo que con la disolución se ganaría un montón. Recemos por el Superior y por la Santa Sede para que de esto se saque una lección y se actúe en consecuencia con la Gloria de Dios y el bien de las almas.
Y ya no miremos para otro lado frente a una prueba más del desastroso resultado  de los frutos del aggiornamiento vaticanosegundista en la Iglesia.